Las relaciones de pareja conforman el espacio psíquico más completo para el desarrollo consciente hacia el amor.
En la pareja, el amor favorece el entendimiento de que toda tensión generada en la relación es fruto de la necesidad de ambos y que solo por esta fuerza trascendente, y gracias a ella, las personalidades disolverán la parcela egocéntrica que les impide amar de acuerdo a su grado evolutivo.
El miedo ha fomentado la exclusión de la espiritualidad de las relaciones, llevando a estas exclusivamente al campo de la familia o de los vínculos sexuales, impidiendo así el verdadero trabajo evolutivo que los seres, a través del amor consciente, pueden realizar gracias a la relación de pareja.
La falta de sentido profundo en el ámbito de las relaciones ha llevado a la humanidad a mantener vínculos de necesidad y ambición. Relaciones, en definitiva, nacidas de la falta de plenitud que lleva a los “enamorados” hacia un callejón sin salida cargado de reproches, por la idea de que, en el otro, uno debería encontrar la felicidad.
Desde esta nueva percepción evolutiva, las almas individuales manifestadas en el tiempo, a través de la presencia de una personalidad, construida para amar, entenderán que el amor no es algo que lleva a la relación o se consigue en ella, si no que la relación favorece el entendimiento del amor, que ya es en esa dimensión donde todos somos uno, aunque, inconscientes de ello.
Sólo a través de una relación, el alma puede entender qué es el amor, y no porque el amor sea algo inteligible, sino porque este se va develando en la medida que uno decide mantenerlo a pesar de cualquier otra emoción nacida de la unión.
Amar en cada instante, a pesar de que todo indique que no debe hacerse, es la única morada del amante, ese que ha decidido dar y en consecuencia trascender cualquier visión personal que le impida conocer los deleites del amor profundo. El amor se va haciendo grande en la medida en que el amante cede ante él, desprendiéndose de todo lo que impide su presencia.
En este nuevo encuentro evolutivo, Magdalena Szaszkiewicz & Luis Jiménez te proponen trabajar las relaciones de pareja de forma consciente, más allá del ámbito terapéutico, aunque todo lo aprendido podrá llevarse al terreno clínico para su aplicación práctica en la consulta.
Este encuentro será eminentemente práctico, a través de trabajo de equipo, juegos y exploraciones conscientes sobre las experiencias ya vividas en el ámbito de las relaciones de pareja.